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Desinformación progresista

El déficit comercial de EE UU creció un 12%

O esto creerán los lectores de El País que, como es normal, hagan caso de la crónica del pasado 11 de junio, escrita por su corresponsal en Nueva York. En el mismo periódico, pero edición electrónica, la agencia EFE tituló el día anterior los mismos hechos de esta forma: “El déficit comercial de EE UU aumenta un 6,3% en abril”. ¿Cuál es la cifra correcta? ¿Y cuál es la cifra que le pide el cuerpo a un lector o un redactor de El País o Europa Press? Solución: los titulares están en orden inverso a las preguntas. Por cierto, Europa Press se permite, después de dar el dato mal, añadir comentarios antibushistas que ni El País los incluyó en su noticia. Como luego veremos, no es determinante la cifra de incremento. Bien podría haber sido un 12%, y lo importante no sería eso, sino los componentes de ese incremento.

O esto creerán los lectores de El País que, como es normal, hagan caso de la crónica del pasado 11 de junio, escrita por su corresponsal en Nueva York. En el mismo periódico, pero edición electrónica, la agencia EFE tituló el día anterior los mismos hechos de esta forma: “El déficit comercial de EE UU aumenta un 6,3% en abril”. ¿Cuál es la cifra correcta? ¿Y cuál es la cifra que le pide el cuerpo a un lector o un redactor de El País o Europa Press? Solución: los titulares están en orden inverso a las preguntas. Por cierto, Europa Press se permite, después de dar el dato mal, añadir comentarios antibushistas que ni El País los incluyó en su noticia. Como luego veremos, no es determinante la cifra de incremento. Bien podría haber sido un 12%, y lo importante no sería eso, sino los componentes de ese incremento.
George W. Bush, presidente de los Estados Unidos
La primera frase del despacho de EFE, periodísticamente correcta pero aburrida para los standards del diario independiente de la mañana, parafrasea sobre el titular, cambiando sólo "aumenta" por "ha aumentado": "El déficit comercial estadounidense ha aumentado un 6,3% en abril y se ha situado en 56.960 millones de dólares (unos 46.414 millones de euros), debido a la subida de las importaciones de petróleo". Primero de todo, hay países en los que el déficit comercial es muy bajo, o incluso es superávit, y la situación económica es más preocupante que la de los demás (caso de Alemania). Y, al revés, países con grandes déficit de balanza de pagos tienen una situación económica que algunos envidiarían (caso de EE UU). Lo segundo es que la explicación sobre la subida de las importaciones de petróleo es un poco rara: la frase es ambigua y no está claro si es un aumento de la importación en cantidad de barriles, o es más debida a un precio en aumento (en realidad, se importó menos crudo pero resultó más caro). Hechas estas salvedades, hay que reconocer que la teoría clásica sobre déficit comercial se preocupa muchísimo por los saldos negativos; con algo de aprensión se les suele llamar “desequilibrios”.
 
Fíjense en la primera frase del artículo incorrecto, el que tiene el 12% (que es casi el doble de 6.3% que cita EFE): “El agujero en la balanza comercial de Estados Unidos volvió a agravarse en abril, al registrar un déficit de 56.960 millones de dólares (unos 42.700 millones de euros) por el alza en el precio del petróleo. El aumento, del 12% respecto a marzo, es sin embargo menor del previsto. Lo positivo es que las exportaciones marcaron un récord, pero también lo hicieron las importaciones”.
 
No tiene desperdicio el vocabulario de El País: en este artículo se trata del “agujero”, que “volvió a agravarse”. El día 3 de junio titulaban “EE UU crea sólo 78.000 empleos en mayo pero rebaja la tasa de paro a niveles de 2001”, con un innecesariamente fuerte “sólo”. El mismo corresponsal que estamos citando, el del aumento “del 12% respecto a marzo”, es el que el mismo día 3 de junio decía aquello de “La Casa Blanca no perdió el tiempo”, “cierto recelo con la mano dura de la SEC en el diseño de normas para proteger a los inversores ante el fraude”, “ahí tampoco escapó de las críticas, por la lentitud de su acción” o “remachó el presidente”, como ya comentamos la semana pasada (énfasis nuestros).
 
Allan Greenspan, gobernador de la Reserva FederalLa versión de EFE también sacude en su segunda mitad: titula la sección “Un problema para el Gobierno”. La versión de Europa Press incorpora, al final, una sección titulada “Un riesgo para la economía mundial”. En esta, nos sacude con un juicio tradicional, después de un resumen “aburrido” y bastante correcto de las cifras: “Las dimensiones del déficit comercial estadounidense podrían redundar a largo plazo en una pérdida del apetito por el dólar por parte de los inversores extranjeros, una posibilidad que aún no se ha puesto de manifiesto. Por este motivo, los agentes internacionales reclaman a George Bush que tome medidas para la reducción del déficit, antes de que este desequilibrio tenga consecuencias sobre el crecimiento de la economía mundial” [énfasis nuestro]. ¡Toma ya! ¿A qué viene esta forma de cargar las tintas, ignorando otros análisis, nada minoritarios, que ahora les vamos a mostrar?
 
Lo de “los agentes internacionales reclaman” va por esto: “En sus últimas valoraciones sobre la situación de la economía mundial, organismos internacionales como [FMI] y [OCDE] han señalado al déficit comercial y por cuenta corriente de [EE UU] como uno de los principales desequilibrios que amenazan la dinámica de crecimiento de la economía mundial, junto a otros desequilibrios”. Bueno, qué quieren que les digamos: en abril de este año, el Banco Mundial publicó en su informe Global Development Finance 2005 (PDF) una subsección que se titulaba: “Los desequilibrios globales y principales monedas se están estabilizando” (p. 3). ¿Que al final tienen razón los pesimistas? Es posible. Pero, mientras tanto, ¿por qué citar selectivamente? A nosotros nos apetece que se cite esta frase del informe del Banco Mundial.
 
 
¿Pero no va fatal la economía?
 
Aunque El País, EFE y Europa Press no lo hacen, Financial Times y Wall Street Journal preguntan a varios analistas qué opinan de esta cifra (la buena, la del 6.3%). Entre otros, Nariman Behravesh, de Global Insight, da su aportación al respecto del incremento del déficit comercial: “Estos datos son una confirmación más de que la economía ha salido con fuerza de su periodo “blando” de marzo – vindicando la valoración más positiva de [Greenspan] comparada con el mercado de bonos”. Efectivamente, junto con los datos conocidos, más detallados en nuestro artículo anterior (desde mayo de 2003, se han creado tres millones y medio de empleos, durante los últimos dos años los EE UU han crecido más que ninguna otra gran nación industrializada, las ventas de casas han alcanzado un máximo histórico, y la inversión directa extranjera en los EE UU volvió a crecer en 2004 por tercer año consecutivo), el análisis correcto de estas cifras de déficit comercial, que el periodista despacha con “[l]o positivo es que las exportaciones marcaron un récord, pero también lo hicieron las importaciones”, sería otro.
 
El análisis más elaborado, realizado con más cuidado, debería haber conducido al siguiente resumen de la situación (titular de Financial Times): “Los datos de comercio apuntan a la recuperación de la economía de los EE UU”. ¿Qué contraste, verdad? Del “agravó” y “agujero”, de ser un “problema para el Gobierno [Bush]” y de un “riesgo para la economía mundial”, ahí es nada, pasamos, en una sola frase, a la recuperación. No es que la frase de FT sea buena, con todo. Más bien debería haber sido “confirman la recuperación”, porque ya se había dicho hace tiempo que había tal mejoría (entre otros, el vindicado Greenspan), y que los datos de marzo eran temporales. David H. Resler y Gerald Zukowski, de Nomura Securities International, opinan, en el artículo citado de The Wall Street Journal, que la comparación de datos “podría conducir a una posterior revisión al alza del primer trimestre”. FT lo redacta parecido: “Las importaciones y exportaciones alcanzaron nuevos records en abril, indicando actividad económica más fuerte que en el mes anterior. La revisión a la baja de los datos de marzo sugieren que el crecimiento del producto interior bruto del primer trimestre podrían revisarse al alza, dijeron economistas consultados”.
 
FT es el periódico que apoyó el resultado de las elecciones en España en las que el actual primer ministro llegó al poder, y regularmente sacude al Presidente Bush. Vamos, que no tienen interés ninguno en dar estos datos e interpretación, pero, con profesionalidad, lo hacen. ¿Creen Vds que se van a enterar de esta versión de la realidad económica de los EE UU por la prensa progresista española?
 
 
Un detalle, para que se hagan una idea
 
Por supuesto, hemos intentado que, después del fiasco de las cifras de obesidad incorrectas que comentábamos en nuestro anterior artículo, la sección Ciencia de El País nos dejase enviarles información diaria que les permitiese conocer otro punto de vista. Después de los comentarios por teléfono (“¡Díos mío, todos los días lobbying de los republicanos!” y otros por el estilo), que no estamos seguros de que sean bromas divertidas, declinaron amablemente que les enviásemos nuestras opiniones y respuestas a las acusaciones diarias que se vierten contra los EE UU. Así que tememos que seguirán leyendo cifras extrañas en el periódico citado.
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